D’Sala Caffè: “El peruano debe saber que tiene buen café»

Foto: Esther Vargas.

En la calle Los Libertadores 143; en la avenida Dos de Mayo 1460; en San Isidro; y en Alberto del Campo en 419-445, Magdalena, en el límite de San Isidro. D’Sala Caffè es un emprendimiento exitoso. Y si hay una forma breve de explicar cómo lo hizo Alessandra Sala debemos decir que impulsada por un sueño se empeñó en crear un espacio que gira alrededor del café, que es acogedor y ofrece productos de primera calidad. 

Alessandra Sala tomaba café a los 10 años con su papá, un italiano que gustaba de compartir con los amigos tardes de café.

-Tenía una rutina con él, íbamos a tomar con sus amigos por la tarde. Yo soy fotógrafa, y cuando me convertí en mamá recurrí a mi segunda pasión, y quise replicar un poco lo que viví con mi papá. 

Foto: Renzo Salazar

«Hemos crecido de a poquitos. Estamos enfocados en la calidad. Queremos que el café esté siempre fresco, que los baristas estén bien capacitados, y que la gente se sienta en casa, que sienta la cafetería como un segundo hogar”, explica Alessandra, quien estudió en Le Cordon Bleu y considera que el aprendizaje es constante en el mundo del café.

-Nuestro plan era tomar café. No había una cafetería de especialidad como la que teníamos en mento, no encontraba los productos que queríamos. Como era una pasión compartida con mi esposo nos lanzamos.  

El café que ofrece es de Rodríguez de Mendoza / Amazonas, y espera incluir pronto los de Cusco y Cajamarca. 

En las cafeterías encuentras café para llevar, café en grano en paquetes de 250 gramos, postres (muy buenos), ensaladas y una serie de sorpresas que cautivan a grandes y chicos. El lugar es familiar.

-Mi idea es que sea un espacio personal y acogedor, como un segundo hogar. Que la gente se sienta en casa es lo que esperamos.

Foto: D’Sala Caffe

D’Sala Caffè: MANIÁTICOS DE LA CALIDAD

Con esta frase, Alessandra Sala define sus buenos resultados. Con orgullo presenta a su equipo de baristas y muestra en su barra diversas opciones para exquisitos paladares. D’Sala Caffè no tiene clientes. Tiene fans. Y esa debe ser una de las más grandes satisfacciones que se puede tener en un negocio, una señal de que se están haciendo las cosas bien.

Alessandra busca incentivar el consumo de café peruano, y esa es una poderosa motivación;. “El peruano debe saber que tiene buen café, y que debe consumir lo suyo. Debemos enseñarle, crear una cultura de café y seguir compitiendo”.  

La cafetería es para Alessandra un espacio de reunión, de conversación, de compartir. Quiere ofrecer la mejor experiencia. Y lo ha logrado. Pero cada día es un nuevo comienzo, porque así es el café, y así son las experiencias que se fundan en la ilusión de hacer los sueños realidad.

DATO: En D’Sala Caffè hay una serie de eventos que deben incluir en su agenda. Más detalles en el Facebook de la cafetería.

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