
Fotos: Fabiola Valle
En el mundo del café, las redes sociales juegan hoy un papel clave que contribuye a sostener y expandir lo que se conoce como marca digital o la presencia en Internet . Los baristas, los productores, tostadores, entrenadores y todos los profesionales vinculados a la industria del café tienen gracias a estos espacios como Facebook, Twitter, Instagram o Youtube, una gran oportunidad para mostrar lo que ofrecen.
El primer paso es saber qué se quiere comunicar y por qué. Una estrategia eficiente radica en reconocer nuestras fortalezas y limitaciones, así como dedicarle tiempo. La marca digital no se construye en dos días. Ganarse una reputación cuesta trabajo, y para ello realmente debemos ser buenos en lo que hacemos. Quizás eres un gran tostador, pero no el mejor en el Arte Latte, o al revés. Debes enfocarte en lo que más sabes, y explotar al máximo ese potencial.

Para ser relevante en las redes sociales, el contenido debe ser original, creativo y sobre todo útil. Es pertinente que determines qué red social es la mejor para ti. De pronto, eres el barista ‘youtuber’ que estamos esperando. Hacerse relevante en un mundo lleno de expertos y tan competitivo solo es posible cuando trabajamos de manera honesta. Aunque parezca que en Facebook o Instagram podemos ‘engañar’ a la audiencia, lo cierto es que basta un comentario negativo que se viralice para sembrar dudas sobre tu trabajo. No prometas lo que no sabes. No prometas lo que no estás seguro (a) de saber explicar. Tu conocimiento es valioso, pero debe llegar de manera efectiva.

Un profesional del mundo del café puede aprovechar la belleza de este mundo para elaborar un portafolio online que permita dar a conocer su trabajo en redes tan visuales como Instagram, donde muchos caen en el error de emplear imágenes de banco de fotos gratuitos que no reflejan la realidad.
LAS CAFETERíAS Y LAS MARCAS DE CAFÉ

Si tienes una cafetería o una marca de café, el marketing evidentemente es como agua para el café, pero debe ser agua buena. Sin embargo, la falla más recurrente que vemos al analizar las redes sociales de los profesionales que seguimos es que no mantienen una actualización constante de sus espacios online. Los que sí lo hacen emplean imágenes ‘de Google’ que muestran una visión poco fiel de la realidad. Lo peor es la falta de un estilo. Los llamados Community Manager, o los responsables del área de marketing trabajan las mismas características de estilo para todos sus clientes. Ahorran costos (plantillas de diseño gratuitas), pero reducen su engagement.
Esta palabrita tan frecuente en el mundo del marketing es la capacidad de un producto (una marca, un blog, una aplicación) de crear relaciones sólidas y duraderas con sus usuarios generando ese compromiso que se establece entre la marca y los consumidores.
Cada red social demanda un esfuerzo preciso y oportuno. Por ello, si realmente buscas ser relevante en la industria piensa en tu marca digital, y en trazar una estrategia.