La Ruta del Café Peruano Blog Noticias Finca Churupampa: la empresa que nació para cambiar el chip de los caficultores
Noticias

Finca Churupampa: la empresa que nació para cambiar el chip de los caficultores

Caficultores de la Finca Churupampa en Chirinos.

Eber Tocto se preguntaba por qué el campo tenía que ser sinónimo de pobreza. Su realidad, como la de muchos caficultores, estuvo marcada por las carencias. «Los agricultores pasamos por una vida complicada, prácticamente no alcanza para nada Mi padre solo pudo darme una carrera técnica. Yo creía que eso tenía que cambiar», dice hoy, convencido de que la transformación es posible.

A los 43 años dirige la empresa Finca Churupampa, en Chirinos, Cajamarca. Aunque estudió mecánica agrícola, lo que le apasionaba era estar entre los cafetales y ayudar a su padre. Junto a sus tres hermanos, Eber logró tecnificar la finca familiar gracias a su experiencia en cooperativas como La Prosperidad y su especialización en el Centro Nacional de Investigaciones de Café (Cenicafe) de Colombia.

La realidad del hermano país le hizo pensar que era fundamental reinvetir los ingresos en mejorar la finca y potenciar la investigación. Todo empezó como en 2014. Eber quiso replicar el modelo con otras familias y nació la empresa que tiene un fuerte enfoque social.

«Hay mucha resistencia al cambio, pero lo hemos logrado poco a poco. Las mujeres son fundamentales en nuestra empresa y son las más disciplinadas y entusiastas a la hora de tomar decisiones para fortalecer sus áreas de trabajo, seguir las innovaciones que proponemos y cuidar el medio ambiente», explica.

Esta empresa caficultora trabaja con 400 productores, de los cuales 80 son mujeres. En el área administrativa, el 50% es mujer.

Han logrado -gracias a la suma de esfuerzos- vender sus cafés a Estados Unidos, Canadá, Australia y Alemania. Un contenedor con café de esta finca se embarcará al país europeo en algunas semanas. El mercado local es un reto pendiente.

Finca Churupampa ha recibido financiamiento y apoyo técnico del programa ProInnóvate del Ministerio de la Producción. Ha participado en concursos como Innovación Empresarial y Validación de la Innovación, así como en el Programa de Apoyo a la Internacionalización (PAI), impulsado por el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo y operado por ProInnóvate.

El compromiso de Finca Churupampa va más allá de la exportación del café de calidad (tienen variedades como geisha y bourbon rosado con un puntaje en taza que llega a 89). La empresa trabaja de cerca con sus productores -de Chirinos, Tabaconas, La Copia, entre otras zonas- para implementar prácticas agrícolas sostenibles, como la recuperación de suelos deteriorados mediante materia orgánica activada. Este método permite fortalecer los nutrientes de la tierra, garantizando una caficultura de largo plazo con parcelas productivas que podrán sostenerse durante décadas. Tienen un centro de investigación formado por agrónomos, expertos en suelos, biólogos y catadores que les permite cuidar y mejorar todo el proceso de calidad.

Cuando encuentran que una experiencia es positiva, de inmediato la escalan con los caficultores. La idea de cambiar el chip es permanente.

“Queremos que las familias caficultoras vean en el cultivo orgánico no solo una fuente de ingresos, sino una oportunidad para mejorar sus condiciones de vida y preservar sus tierras», dice Eber, quien tiene claro que el relevo generacional es importante: «Los jóvenes deben ver en el campo una oportunidad. No queremos que se vayan a la ciudad, queremos que trabajen en sus tierras, que vean que es posible lograr sus sueños».

DATO

Es importante destacar que la empresa no descuida sus redes sociales y quiere tener más presencia en estos espacios digitales, donde destaca a sus productores y cuenta parte de su historia.

Salir de la versión móvil