La Delice Restobar Café, un pequeño y acogedor espacio en Lince

Fotos: Nancy Onaga

Es domingo, casi mediodía y el sol nos acompaña a cada paso que damos. Estamos por llegar a Lince para conocer la historia de La Delice Restobar Café.

Diana Castro nos recibe con una amplia sonrisa: Al cruzar el umbral, inmediatamente notas el cariño puesto en cada detalle. Es un lugar especial por donde lo mires. En un instante, olvidamos el tremendo ruido de los autos pasando por la avenida en la que se encuentra el local.

Diana tiene 32 años y una gran actitud. Inició este proyecto con una amiga de clases de Le Cordon Blue. En ese momento vendían pastelitos y sus clientes las animaban a tener un espacio propio. En mente, cocinaban el proyecto y de a pocos vieron que se concretaban las cosas. Luego de evaluar varios lugares se decidieron. Les pareció interesante mostrar un concepto de calidad, buena atención, y excelente comida a buen precio. Apostaron por crear un café en la zona, donde la gente no necesite viajar hasta Miraflores o San Isidro porque ya tienen acá en Lince el suyo.

La idea de tener un café era como aquellos que vieron en sus múltiples viajes al exterior. Siendo conscientes que, en Perú, tenemos un excelente café pero que no lo explotamos como se debe tomaron maletas y salieron a buscar el café perfecto, el ideal para su proyecto. Querían conocer de cerca la zona cafetera, y fueron por Tarma, Chanchamayo y Pichanaqui. Vieron la realidad del caficultor y tomaron decisiones que definirían la propuesta de La Delice Restobar Café.

Luego de algunas evaluaciones en el camino, llegaron a un acuerdo y se quedaron encantadas con la calidad del café de la zona de Pichanaqui, el cual venden en su local. Así nació ‘Killasami’, un café 100% orgánico que es un proyecto social que busca beneficiar al caficultor.

Desde que su socia tomó otro rumbo en el exterior, Diana sigue optimista y de la mano de Jean, su nuevo socio. Ambos se encargan diariamente de cautivar a todo aquel que ingrese a su local. Preparan el café, las ensaladas, los sánguches. Diana se encarga de los postres.

El ambiente te jala la mirada con paredes de colores y mensajes divertidos. Es un pequeño espacio de dos niveles, donde puedes pasar un rato agradable y en compañía de un buen café.

Tomen nota:
Dirección : Av. José Pardo de Zela 130, en Lince
Horario : Lunes a sábado de 8 a.m. a 10 p.m. y domingos de 8 a.m. a 2 p.m.

1 Comment

  1. Me encanta!!!
    Las veces que he ido he salido feliz de ahí tanto por el ambiente, la atención, la comida, el olor y hasta de la linda energía que irradian ahí.
    Muy buen lugar para sentarse en el 2do piso y comerse lo que sea porque todo es buenasooo!!!

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